domingo, 27 de enero de 2013

En un parpadeo ~

Todo se va.
Todo cambia demasiado rápido.
En un suspiro, en una idea, en un grito, en una mirada, en un parpadeo:
Todo puede cambiar.

Hoy puede ser el mejor día de tu vida y mañana el peor.
Hoy todo risas y mañana todo lágrimas.

Pero el mañana llegó ya. Ayer fueron todo risas, hoy todo lágrimas.

La frase de este fin de semana ha sido: LOS LIVERTOS SE HAN DISUELTO
La gente viene, te pregunta, ¿qué ha pasado? ¿cómo es que os habéis separado?
Cada vez estoy más harta. No nos hemos disuelto.
No.
Me han echado. Bien subrayado, ahí, que se note.

Ha sido todo demasiado rápido e inesperado.
Yo sabía que algo pasaba. No quiero nombrar a nadie, simplemente, uno de los guitarristas siempre seguía las opiniones del otro (a pesar de estar opuesto a ellas) por no herir sus sentimientos, y yo era la que aguantaba esas decisiones mal tomadas. Y me quejaba. Y peleábamos. Y luego se arreglaba.
Nueva decisión tomada por el de siempre: Oye, que a partir de ahora, tocamos solo canciones nuestras propias, ¿eh? ya vale de covers. Y aceptamos. Ellos, porque uno sigue al otro. Yo, por no discutir.
Pasa el tiempo. Yo, tres canciones compuestas. Ellos, ninguna.

Suena mal todo, dicho así. Pero estoy yendo a la parte del problema. Por el lado bueno, ellos eran de mis mejores amigos. La música une mucho.

De repente, aparece publicidad de un concurso. Consiste en presentarse con una canción compuesta por tu grupo. Yo, feliz e ilusionada. Ellos, no querían.
¿Conclusión? Me presento yo con algún amigo. Las canciones son mías y quiero. ¿Qué mas da?

Pues da, y se enfadaron excesivamente. Entiendo que pudiera molestarles un poco, vale, lo entiendo. Pero la importancia que le dieron y la conversación que tuvieron conmigo, eso no lo puede entender nadie. Ellos no quisieron presentarse conmigo y la canción es mía. No tienen derecho a quejarse.

Ikey:
supònte el casual que es grupo o concurso?

Tú:
en serio?

Ikey:
supontelo

Tú:
no lo quiero suponer

Ikey:
he dicho que te lo supongas, no que dejes el concurso

Ikey:
entonces el concurso tiene el mismo peso o mas que los livertos? :S

Tú:
me vais a hacer que escoja entre enrique y vosotros tambien? o alguna cagada semejante?
porque esto me parece
de niños de infantil

Yo no lo puedo evitar, pero en las discusiones mi mejor arma es la ironía, el sarcasmo y las bromas que duelen. Y en esa conversación me vi obligada a usar muchas, muchas de esas.

La parte que más me gusta es esta:

Ikey:
no tenemos los mismos gustos realmente
las canciones que queremos no tienen voz

Ikey:
siempre hay pelea
por un motivo u otro

Tú:
me estais echando

Ikey:
no
nos estamos disolviendo

Tú:
no
porque vosotros
seguireis juntos

Ikey:
pero no seremos mas
los livertos
eso somos

Tú:
esto es muy fuerte

Ikey:
fuimos
los 3

Me encanta. Nos hemos disuelto. Sin mi opinión, y ellos dos siguen. CON OTRO NOMBRE, CUIDADO, PORQUE NOS HEMOS DISUELTO Y TAL.
A ver, me han echado. A mí que no me vengan con cuentos. Es demasiado todo.

Y nada, vuelves el sábado de San Fernando, de empezar las grabaciones de tu canción, vas por la calle con tus cascos, música a tope, una sonrisa en la cara, y ¿qué vemos en el heavy? A tus ex-guitarristas, claro. Los cuales ni te miran. Porque, creedme, la conversación no terminó nada bien. Además, ellos dos tenían un tonito poco agradable. Quédate con los buenos recuerdos, me decían. Obviamente los mandé lejos.

Lo más gracioso es cuando vienen personas, una tras otra, a preguntarte por qué os habéis disuelto y has de explicar que su concepto de 'disolver' es más bien 'echar del grupo'. 

Lo que más detesto es que hoy me ha dado un ataque de ansiedad pensando en eso. Es el segundo este mes (el otro con un motivo diferente) y el segundo de mi vida. No tiene sentido. Sí que tenían (y, por desgracia, durante un tiempo me costará que no tengan) mucha importancia para mí, pero por dios, un ataque de una hora y pico es excesivo. Qué mal lo he pasado.

Y nada, ahora ellos pasarán como muchos otros, por desgracia, a ser simplemente gente que yo solía conocer...








lunes, 21 de enero de 2013

Carpe Diem ~

Hay oportunidades que la vida nos ofrece de repente. Para mí, las mejores son aquellas que me permiten viajar. Me hace sentir que el mundo está vivo.

Hace un par de años tuve la suerte de realizar un intercambio con Alemania, concretamente con el pueblo de Kehl, cerca de la frontera con Francia. Visitamos Estrasburgo, Friburgo y pasamos una semana estupenda.

Aprovechad esta oportunidad, que en la vida hay pocas.














Y este año, la oportunidad se repite. Me encanta.
Mi colegio va hacer un intercambio con el instituto Elisabethschule en Marburg y tiene pinta de que va a ser una experiencia increíble. 
Lo único que no me gustó del intercambio anterior fue que, para nosotros, es algo muy inusual. Cuando los alemanes llegaron al instituto, la gente se moría de ganas de conocerles, de hacer amistades, de preguntarles mil cosas e intentar entablar conversaciones en inglés; a pesar de no participar directamente en él. Sin embargo, para los alemanes, nosotros éramos "un intercambio más", por decirlo de algún modo. Allí hacen intercambios cada año a montones de sitios. Fue un poco triste, al llegar, ver que la reacción que nosotros causamos allí no es para nada la que ellos causan aquí.
Pero, a parte de eso, todo fue perfecto.

Seguro que este intercambio va a ser igual o más genial aún.
Ellos tendrán la oportunidad de visitar durante una semana nuestra ciudad, El Puerto de Santa María.
Es una ciudad bonita, no es perfecta ni entra en mi grupo de ciudades preferidas, pero no se puede negar que es bonita.
Seguro que disfrutan muchísimo visitando las playas y paseando por una ciudad que nada tiene que ver con la suya. La plaza de toros y la iglesia, a pesar de las ideas que ellas representan y a las cuales me opongo, son también monumentos importantes a visitar. 
Aunque, sin duda, mi preferido es el castillo de San Marcos, conocido como 'el castillito'.


Yo prefiero mil veces Alemania a España, para que engañarnos, pero ellos suelen pasarlo muy bien aquí.

Tras recibirles a ellos, iremos nosotros en junio a Marburg, considerada una de las ciudades universitarias de Alemania. Pertenece al estado Federado de Hesse y se divide en dos por el río Lahn. En esta ciudad habitan alrededor de unas ochenta mil personas.

Aquí algunas fotos que me han enamorado:






Precioso, de verdad, parecen fotos sacadas de una película, me enamoran.
Mi cámara explotará cuando vaya en junio. Ya os contaré qué tal.
Un besote~


lunes, 14 de enero de 2013

Magia en cada segundo contigo ~

Hay sucesos, momentos, personas que te cambian.
Cambian tu modo de ser.
Cambian tu modo de sentir.
Cambian tu modo de ver.
Opiniones, formas de pensar que nunca pensaste que pudieran variar.
Todo aquello que tenías claro, fuertes pilares de valores morales e ideales, puede verse derrumbado por el más mínimo soplo de aire. El de su risa, quizá.

Yo nunca había querido así a nadie. Querer de felicidad, adicción, preocupación y necesidad.
Apareció cuando menos lo esperaba.
Nunca imaginé que pudiera sentirme tan feliz con alguien.

La única pega es que vive en otra ciudad y solo le veo los findes.
Pero bueno, así me aprendo bien los recorridos de cercanías de Renfe.



El finde fue muy muy bueno. Estábamos los dos tumbados, yo a punto de quedarme dormida, y mi cabeza empezó a componer. Es su culpa. Ahora tengo en proceso otra canción.

Me encontré también con una chica que pasó de ser mi mejor amiga a no hablarme, sin yo tener idea del por qué, y me evitó. No sabía que yo tenía el poder de echar gente de sitios con mi presencia. Es divertido. Creo.

Y me encontré también con mi profesor de Proyecto Integrado en la estación (si no lo decía no me sentía realizada).

Dejo de escribir ya que necesito empezar a componer en serio mi canción.
Un besote.

miércoles, 9 de enero de 2013

Una puerta se cierra y otra se abre ~



Comencé el año abrazando gente con la boca llena de uvas.
El móvil sonaba una y otra vez: mensajes, llamadas... me hizo muy feliz que me llamara mi padre.

Estuve jugando al Just Dance 4 en la wii con mis primos y tal hasta las cuatro de la mañana, que me llamó mi novio para charlar un ratito. Un ratito... cuando me di cuenta eran las cinco y cuarto y se había ido todo el mundo. Se me va el tiempo excesivamente rápido cuando se trata de él.
A las siete me volvió a llamar y seguimos charlando. Mi fin de año estuvo bien.

No soy partidaria de hacer propósitos de año nuevo porque sé que no los voy a cumplir, así que simplemente intento llevar un año más ameno que el anterior. En diciembre me empecé a encerrar en casa y a no salir por la navidad, que la odio demasiado, y ahora mismo me conformo con intentar volver a abrirme. Pero no tengo ganas.

Dediqué los días hasta reyes saliendo por la noche al bar heavy, yendo y viniendo de San Fernando o recibiéndole aquí, haciendo twitcams con mi amiga Maribel, haciendo fotos, fui también a un concierto de Bulzubelic Awful ...





El día de reyes fue genial. Tintes, zapatos de plataforma, cascos, chuches, lentillas. Muy yo todo.
Los zapatos de plataforma son demasiado geniales:


El 7 me fui a pasar el día a San Fernando de nuevo, antes de tener que volver al mundo real y  estar un mayor intervalo de tiempo sin verle entre encuentro y encuentro. Sin embargo, el 8 vino él a recogerme al instituto y a ayudarme a teñirme el pelo. Qué día tan perfecto, dios mío. Hacía siglos que no lo pasaba tan bien. Además, me regaló un tinte azul que sabía que yo me moría por tener. Es demasiado adorable.

Pelo a lo chupachups de sabores.

Y bueno, ahora ya solo me queda seguir adelante. Estudiar para intentar sacar las mismas notas o mejores que el trimestre anterior, intentar sufrir lo menos posible en casa (que no es tan fácil), dibujar, leer... y componer, que Los Livertos queremos empezar a tener nuestras propias canciones, pero la inspiración viene sola, argh.

Esperemos que este 2013 sea un año lleno de inspiraciones tanto para mí como para vosotros, que tiene pinta de que va a hacer falta.

Feliz año <3

El 2012 se marcha ~

Madrugar el último día de clase antes de Navidad no rinde, a no ser que vayas a cantar en el instituto, entonces rinde excesivamente.
Comenzar el día con un concierto es emocionante. Se disfruta mucho en el escenario, lo echaba de menos.

Con Alba, artistaza

Para continuar con un día perfecto, coges la masa de crêpes que preparaste el día anterior y te vas a San Fernando a hacerle de comer a tu novio. Si presume de tus geniales notas delante de sus padres, el día se torna aún más perfecto.

Pero, como dice mi amiga Laura, si el día empieza bien acaba mal. Es un equilibrio, dice.
Pude comprobar que tiene razón.

En resumen, un amigo de mi novio me chafó completamente el regalo que pensaba hacerle a él por Navidad. Ambos nos molestamos muchísimo. Y para que el equilibrio fuera completo, pues perdí el último tren de vuelta. 21 de diciembre, y tu madre te dice por el móvil "Puede que no haya sido el fin del mundo, pero va a ser el fin de tu mundo". Y te ríes, porque total, ¿puede empeorar aún más?
Los castigos de mi madre son nada, así que a los dos días tenía mi libertad de nuevo.

Es más lindo él..
Yo detesto la Navidad. Soy atea y no me gustan nada las cenas familiares con villancicos de fondo e interrogatorios sobre el novio. Además, mis gustos no son muy bien recibidos en mi familia, véanse mis tintes, mis tendencias musicales y demás, y son continuas las críticas e intentos de cambiar mi personalidad.
Pero de la nada, apareció la vecina invitándonos a su casa a bailar sevillanas y ahí sí que fui.

Pasé los últimos días del 2012 en San Fernando y las últimas noches en el bar heavy del centro con mis amigos. No pude salir mucho porque la mayoría estaban de viajes familiares repartidos por España, aunque no me quejo. El ambiente navideño me atonta un poco y no me gusta salir. Eso de ir andando por la calle y ver luces y oír villancicos me puede. Así que dedicaba las tardes a dibujar, oír música, tocar la guitarra y chatear con ellos.

Cuando te das cuenta llega el último día del año. Me pasé mañana y tarde encerrada en mi habitación dibujando, intentando autoconvencerme de salir por la noche, sin ganas. Por estar todo el día encerrada en mi cuarto y no ayudar a preparar las cosas de la cena, me castigaron sin salir. Me alegré mucho.

Mi prima me hizo la noche más amena, pasamos horas en mi habitación charlando.


Y cuando menos lo esperábamos, escuchamos que había mucho ajetreo en la casa. Las uvas.
Una tras otra, me las comí todas a tiempo. El típico gracioso de turno hacía chistes y me costaba mucho reírme y comer a la vez. En los primeros segundos del 2013, yo iba tal que así: